Muchas veces te ves obligado a irte.
Por vida, por trabajo, por circunstancias generales que hacen posible tener que irte a otro lugar. En un mundo globalizado en el que vivimos, es poco probable que no te haya ocurrido alguna vez.
Y siempre se dice que nada cambiará, que volveremos algún día, que los recuerdos no se apagarán.
'Brooklyn', una historia del siglo pasado, nos demuestra que no es tan fácil como parece.
Que llegas a otro lugar, y rápidamente solo piensas en volver. Pero que, pasado el tiempo, puede que ese sentimiento de vuelta se diluya entre la gente, el trabajo, los pequeños momentos del día a día; en definitiva, la vida que pasa. Creemos y nos convencemos de que siempre recordaremos el calor del hogar familiar, pero un día nos olvidamos de él sin saber qué ha pasado.
Entonces estamos entre dos aguas, sin ninguna pista de cuál camino tomar, si es que hay que tomar alguno.