viernes, 11 de diciembre de 2015

Langosta (2015) de Yorgos Lanthimos


Se oían risas en el cine.
Es normal que en cuanto lo horrendo o perturbador asome la cabeza nuestra primera reacción sea reírnos. Es nuestra primera línea de defensa: atacamos con carcajadas cuando sabemos bien que nuestra propia miseria está siendo diseccionada sin piedad, porque la otra alternativa sería llorar.
Y, sin embargo, algo queda, una fina capa que se va añadiendo a un retrato nuestro a medio pintar.
'Langosta' es la clase de retrato que asusta.
Uno clarividente y sincero, pero también inquietante porque ¿alguien sería capaz de poner en duda que lo que muestra no está pasando? ¿nadie reconoce, pasado por el filtro de la ficción deformante, ningún comportamiento visto antes?
En la tradición de la buena ciencia ficción, Yorgos Lanthimos no inventa nada, solo crea una realidad exagerada que se revela, risa tras risa, verdadera.