sábado, 29 de octubre de 2016

Yo, Daniel Blake (2016), de Ken Loach


"Gente buena, gente honesta, en la calle."
Con esta frase se refiere una trabajadora social a todos los que, al contrario que Daniel Blake, no han tenido tanta "suerte" como él.
Aquellos que han tenido la desgracia de verse mendigando, sin acceso a trabajos pobremente remunerados, inciertas ayudas o procesos administrativos eternos.
Y cabe preguntarse si esa "suerte" se puede definir como tal, o nuestro sistema laboral la ha transformado en una triste parodia de si misma.

'Yo, Daniel Blake' no pretende ser comentario social, ni político.
Al contrario, se quita cualquier asomo de solemnidad, cualquier rastro de orgullo, y busca ser un alegato humano. Nada más sencillo, y a la vez más complejo, en tiempos en los que hay que buscar un culpable a la fuerza.

viernes, 28 de octubre de 2016

Que Dios nos Perdone (2016), de Rodrigo Sorogoyen


Asesinos en serie, crueldad policial, miseria humana y social.
Suelen ser cosas derivadas unas de otras, pero casi siempre se sienten separadas cuando se ven en las noticias.
Uno no puede concebir que alguien asesine metódicamente por placer, no, "eso no pasa" (aquí en España). Tampoco tiene sentido que aquella anciana del tercer piso fuera golpeada hasta la muerte, fijo que tuvo un ataque o simplemente le llegó la hora.
Y qué asco los maderos tío, siempre dando por culo.

En 'Que Dios nos Perdone' todo eso está relacionado, por unos hilos tan finos que solo se percibirían si se viera todo el proceso desde fuera, como hace el espectador.

sábado, 22 de octubre de 2016

Un Monstruo viene a Verme (2016), de Juan Antonio Bayona


La figura de una conciencia infantil no es tan extraña como pudiera parecer.
Al fin y al cabo, ¿qué sería de un niño si no pudiera contar con un amigo inseparable con el que compartir miserias y alegrías?
Y si además puede estar ahí incondicionalmente, de la manera en que los adultos no van a estar, mejor que mejor.

'Un Monstruo viene a Verme' es esa clase de historia, salvo por una pequeña cosa: la conciencia infantil que podría tomar forma amable es un horripilante monstruo de varios pisos de alto, compuesto de ramas nudosas y ojos que parecen carbones al rojo. La conciencia apropiada para un joven, Connor O'Malley, que como dice el propio narrador, es "demasiado mayor para ser un niño, demasiado pequeño para ser un hombre".

miércoles, 19 de octubre de 2016

Crisis in Six Scenes (2016), de Woody Allen


Decía Woody Allen que no sabía lo que iba a resultar de su acuerdo con Amazon, que lo había tomado por el dinero y la presión de sus allegados, pero que no se veía capaz de rellenar seis capítulos de historia.

Y una vez vista... hay que darle la razón al bueno de Woody.
Por algo los maestros lo son, porque saben dónde se han equivocado.
'Crisis in Six Scenes' no es tanto una serie como una descarada película de tres horas, cortada en los mínimos veinte minutos exigibles seis veces para que sus partes sean algo parecido a capítulos. Pero carecen de ritmo, de foco y hasta picos de interés apropiados, con descarados "machetazos" allá donde acaba cada uno.

martes, 11 de octubre de 2016

Luke Cage (2016), de Cheo Hodari Coker


En la genial intro de esta serie se presenta una curiosa imagen: el cuerpo de un hombre donde se proyectan distintas calles y avenidas del barrio de Harlem, casi como tatuajes que llevara marcados en la piel, que forman parte de su esencia tanto como él de la suya.
Es justo esa idea la que se establece y se desarrolla a lo largo de los trece capítulos que la componen, porque Luke Cage es el primer héroe de clase obrera con conciencia social. Para él, no importa tanto dar su merecido a los villanos, como despertar a su gente para que dejen de aclamarlos como ídolos.

sábado, 8 de octubre de 2016

Los 7 Magníficos (2016), de Antoine Fuqua


Da la impresión de que el western, hoy por hoy, está condenado a desnaturalizarse.
Abundan últimamente los ejemplos irónicos, posmodernos, intimistas, fantasiosos... de un género al que le cuesta encontrar adeptos en el nuevo siglo, algo que se entiende viendo la sobreexplotación que tuvo en décadas pasadas.
El clásico vaquero y su revólver han quedado obsoletos, dejando un triste páramo en el género que está lejos de llenarse por parte de quienes pongan la pasta.

Teniendo eso en cuenta, 'Los Siete Magníficos' casi merecería la categoría de milagro.

lunes, 3 de octubre de 2016

Stranger Things (2016), de The Duffer Brothers


‘Stranger Things’ es todo lo que quisimos desde siempre.
Es Pennywise adoptando la forma más aterradora que nunca vimos. Es el barco de ‘Los Goonies’ lleno de piratas zombies. Es la Nada consumiendo Fantasía con todo lujo de detalles. Son los matones de ‘Cuenta Conmigo’ siendo tan crueles como parecían ser. Es ver al Rey Goblin seduciendo a Sara para llevársela a la cama.
El secreto de su éxito radica en, paradójicamente, no pisar el freno en lo que nuestra mente infantil no alcanzaba a imaginar, y nuestra mente adulta piensa todo el rato. Es ver por fin detrás de la puerta prohibida. 

sábado, 1 de octubre de 2016

El Hogar de Miss Peregrine para Niños Peculiares (2016), de Tim Burton


El 1º Bucle Temporal nos lleva a principios de los 90, o quizá un poco antes, a finales de los 80.
Tim Burton es el grandísimo director que creaba mundos fantásticos plenos de cierta melancolía y tristeza, maravillosos, pero ante todo tremendamente humanos.
Prácticamente ese es el Burton que recuperamos al principio de esta interesante fábula, solo que encima con el plus de sabiduría que da la madurez: la historia de Jake, otro eterno marginado, está punteada por las fantásticas narraciones de su abuelo Abe, que le habla de un orfanato oculto en Gales donde viven los peculiares niños de Miss Peregrine, y nuestros ojos se abren casi tanto como los del pequeño cuando le oímos hablar de monstruos terribles o chicos invisibles, a los que encima da forma con irreales fotografías antiguas.
El gusto es doble porque, como digo, Burton ha aprendido con la edad y ya no juega al despiste metiendo su habitual imaginería cuanto antes. Al contrario, la soleada California donde vive Jake nos recibe desde la primera escena, con sus casas bajas y líneas rectas, donde la única posibilidad de escape reside en la ilusión de que algún día Jake encontrará el perdido orfanato.